California: calentamiento global y elecciones
No soy fan de Arnold Schwarzenegger. Tiendo a desconfiar de sus propuestas y definitivamente no respaldo sus posiciones políticas. Pero me ha parecido interesante y positivo el paso dado para enfrentar las emisiones de gases invernadero. Las medidas adoptadas por el gobierno de California, el estado más numeroso y rico de los Estados Unidos, están dentro del espíritu del Protocolo de Kyoto y sean cuales sean las razones de Schwarzenegger para impulsarla, son bienvenidas. Claro que la cosa no queda ahí. Se ha dado un paso, importante pero de papel.
Lo verdaderamente saludable es que se cumpla a cabalidad y se evite que en los pasillos se desmejore y he ahí el problema. El gobernador está moviendo sus fichas con vistas a la reelección. Sus posiciones políticas han variado ligeramente respecto al gobierno de su compañero de partido George W. Bush. Ahora impulsa medidas frente al calentamiento global y la contaminación. El resultado es que el ex-terminator aparece como favorito en las encuestas, frente a la candidatura demócrata de Phil Angelides.
Pero, lo reconozco, no me causa gracia Schwarzenegger y si estuviera en California, sin dudarlo votaría por Peter Camejo, del Partido Verde.
El problema más grande de Schwarzenegger es que al igual que en sus películas, tiene mucha imagen pero rinde poca sustancia, poco «performance». Bien sea por motivos políticos de evidente inminencia, o por un interés genuino en el legado ambiental que dejaremos, esperemos que el «Governator» no sólo se enliste, sino que también desarrolle la ofensiva desde California en la vanguardia mundial contra el calentamiento global, no nos quede como último recurso enviar un Cyborg en el tiempo para «concientizar» al pópulo y las corporaciones, violentamente, si es necesario. Ahora esperamos que los líderes demócratas a niveles locales, estatales y federales sean consistentes con sus principios partidistas y hagan (aunque sea para crear base en estos momentos de confusión electoral) lo que hizo Schwarzenegger. Y dejen ya de jugar a Hollywood, ya nos conocemos el guión.